Quizá algunos ni siquiera os acordéis de él. Pero el señor Barragán ha marcado un antes y un después en la historia del chiste guarro en televisión. Parapetado detrás de una sucia y roída chaqueta, unas gafas de culo de vaso y una gorra incrustada en el grasiento pelo, hizo que media España se tronchara durante un cuarto de siglo con un vagabundo y sus vulgaridades.
Pero se ha quitado el disfraz. Fue el pasado martes, 13 de mayo de 2008. Ocurrió en el programa “El Hormiguero”, de Cuatro, presentado por Pablo Motos. Y consiguió que durante dos minutos, España contuviera la respiración (con la hipoxia consecuente). Éste fue el resultado. 25 años después, éste es el auténtico señor Barragán:
Desde que apareció en el programa de Alfonso Arús “La casa por la ventana” (1989, TVE) o en “No te rías que es peor” (1990-1995, TVE), Barragán estuvo en la primera plana del humor verde y a veces escatológico de la televisión española. Compartió cartel con otros grandes como Arévalo, Marianico “el corto” o Pedro Reyes.
Después apareció en el espacio que presentaba Elsa Anka, “Sonría, por favor” (Telecinco, 1996), donde perpetuó su fama. El lustro siguiente lo pasó entre sus actuaciones particulares y la televisión catalana, para reaparecer luego con el nuevo milenio en “Torrente 2: Misión en Marbella” y en “Torrente 3: El protector”, de la mano de Santiago Segura. Y lo cierto es que el estilo de las películas del “brazo tonto de la ley” le venía al pelo.
Además, el próximo 17 de junio, Barragán estará en la sala Luz de gas, en Barcelona, para celebrar sus 25 años en el mundo del espectáculo con “Barragán. El Musical”. Como este es un blog para todos los públicos, no insertaré uno de sus chistes. Eso sí, me limitaré a enlazarlo: chiste de la cebolla. También hay una selección de chistes cortos (pero igual de guarros) en su web, barragan.tv.
Nada que ver con su tocayo, porque Barragán, es decir, José María Rubio, se llama igual que un santo católico español canonizado por Juan Pablo II en 2003. El jesuita, muerto en 1929 y calificado como “el apóstol de Madrid” por el arzobispo de la ciudad de la primera etapa franquista, tiene hasta su propia web. Todo un moderno…
Pero se ha quitado el disfraz. Fue el pasado martes, 13 de mayo de 2008. Ocurrió en el programa “El Hormiguero”, de Cuatro, presentado por Pablo Motos. Y consiguió que durante dos minutos, España contuviera la respiración (con la hipoxia consecuente). Éste fue el resultado. 25 años después, éste es el auténtico señor Barragán:
Desde que apareció en el programa de Alfonso Arús “La casa por la ventana” (1989, TVE) o en “No te rías que es peor” (1990-1995, TVE), Barragán estuvo en la primera plana del humor verde y a veces escatológico de la televisión española. Compartió cartel con otros grandes como Arévalo, Marianico “el corto” o Pedro Reyes.
Después apareció en el espacio que presentaba Elsa Anka, “Sonría, por favor” (Telecinco, 1996), donde perpetuó su fama. El lustro siguiente lo pasó entre sus actuaciones particulares y la televisión catalana, para reaparecer luego con el nuevo milenio en “Torrente 2: Misión en Marbella” y en “Torrente 3: El protector”, de la mano de Santiago Segura. Y lo cierto es que el estilo de las películas del “brazo tonto de la ley” le venía al pelo.
Además, el próximo 17 de junio, Barragán estará en la sala Luz de gas, en Barcelona, para celebrar sus 25 años en el mundo del espectáculo con “Barragán. El Musical”. Como este es un blog para todos los públicos, no insertaré uno de sus chistes. Eso sí, me limitaré a enlazarlo: chiste de la cebolla. También hay una selección de chistes cortos (pero igual de guarros) en su web, barragan.tv.
Nada que ver con su tocayo, porque Barragán, es decir, José María Rubio, se llama igual que un santo católico español canonizado por Juan Pablo II en 2003. El jesuita, muerto en 1929 y calificado como “el apóstol de Madrid” por el arzobispo de la ciudad de la primera etapa franquista, tiene hasta su propia web. Todo un moderno…
1 comentario:
jaja,
a mí de pequeña este hombre no me hacía gracia, me daba miedo...
pobre, se le han quedado los ojos chiquitillos de estar toda su vida con las mismas gafas de culo de botella
xD
el chiste de la cebolla lo había oído, pero no que se utilizase la palabra "sagrario" para contarlo
xD
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